Las emisiones de carbono de Amazon registraron una ligera disminución en 2023, impulsadas por un aumento en las compras de energía renovable y la reducción de la contaminación asociada con la construcción, hardware y equipos, según su último informe de sostenibilidad.
En 2019, Amazon se comprometió a alcanzar emisiones netas de carbono cero para 2040. Aunque inicialmente hubo un aumento en las emisiones de carbono, que pasaron de aproximadamente 51 millones de toneladas métricas de CO2 en 2019 a más de 71 millones en 2021, parece que la huella de carbono de la empresa ha mostrado un leve retroceso en los últimos años, cayendo un 3 por ciento en 2023 a poco menos de 69 millones de toneladas métricas de CO2.
Para ponerlo en perspectiva, las emisiones de carbono de Amazon el año pasado fueron equivalentes a las de 184 plantas de energía a gas. Aunque la empresa aún emite alrededor de un 34 por ciento más de contaminación por carbono que en 2019, cuando realizó su promesa climática, es notable que haya logrado reducir ligeramente sus emisiones en un año en el que otras grandes tecnológicas vieron aumentos debido a la integración de nuevas herramientas de inteligencia artificial.
Amazon atribuye esta reducción principalmente a la limpieza de la contaminación por carbono de su uso de electricidad y a la disminución de las emisiones indirectas de sus cadenas de suministro, que bajaron un 11 por ciento y un 5 por ciento respectivamente en 2023. Además, la compañía anunció haber alcanzado su objetivo de abastecer el 100 por ciento de su consumo eléctrico con energía renovable en 2023, siete años antes de su meta inicial de 2030.
Desglosar el significado de “abastecer el 100 por ciento” puede ser complicado, pero es crucial para comprender los compromisos de energía limpia de cualquier empresa. Aún no hay suficiente energía renovable disponible globalmente para cumplir con los objetivos climáticos, por lo que Amazon y otras grandes empresas suelen recurrir a Certificados de Energía Renovable (RECs) para compensar su consumo de electricidad con la producción de energía renovable.
La calidad de estos RECs es vital, ya que su bajo costo puede no incentivar adecuadamente nuevos proyectos de energía limpia. De acuerdo a una investigación de 2022, muchas empresas han sobreestimado las reducciones de emisiones de carbono a través de RECs. Para detener efectivamente el cambio climático, se necesitan nuevas fuentes de energía renovable.
Empresas como Microsoft y Google están avanzando en esta dirección al establecer metas para igualar su consumo de electricidad con energía limpia generada localmente de manera horaria, no solo anualmente. Esta estrategia busca apoyar un futuro en el que la energía renovable esté disponible las 24 horas, los 7 días de la semana en cualquier red a la que estas empresas se conecten.
Una alternativa adicional son los Acuerdos de Compra de Energía (PPA), contratos a largo plazo que respaldan el desarrollo de proyectos de energía limpia y la compra directa de electricidad de estos proyectos. Según BloombergNEF, Amazon es el mayor comprador corporativo de energía renovable, adquiriendo más energía solar y eólica a través de PPAs que Google y Microsoft juntos.
En comparación, Google y Microsoft vieron un aumento en sus emisiones de gases de efecto invernadero del 13 y 20 por ciento respectivamente el año pasado, atribuible a la integración de inteligencia artificial en sus operaciones. Amazon, aunque también está implementando IA en servicios como Alexa, ha logrado gestionar mejor sus emisiones, con una disminución del 13 por ciento en las emisiones derivadas de bienes de capital el año pasado, según informes de Bloomberg.
La pandemia de COVID-19 impulsó el crecimiento de Amazon, aumentando temporalmente sus emisiones de carbono. Sin embargo, la empresa ha reducido costos en almacenes y centros de datos, contribuyendo a una disminución general en sus emisiones de carbono durante el año pasado.