Elon Musk intentó suavizar el historial de Donald Trump sobre el cambio climático, pero su intento de ganar apoyo para los vehículos eléctricos resultó fallido.
Durante una conversación de dos horas en X plagada de fallos técnicos, Elon Musk intentó convencer a Donald Trump de que el cambio climático es real y que los autos eléctricos no son tan malos como el expresidente los ha descrito en su campaña. Este esfuerzo de Musk, quien una vez fue considerado un líder ambiental, fue un intento fallido de blanquear el desastroso historial de Trump en cuanto al cambio climático.
Musk, quien apoyó a Trump tras el fallido intento de asesinato y está ayudando a financiar un súper PAC que apoya su candidatura, trató de ganar el favor de Trump mostrando su apoyo a la perforación de petróleo y gas, mientras minimizaba la amenaza del cambio climático. Al mismo tiempo, Musk intentó presentar una propuesta más amigable con la base MAGA para sus vehículos eléctricos (EVs).
Elon Musk y su intento de suavizar las críticas hacia los EVs
“Cuando ves nuestros autos, no creemos que el cuidado del medio ambiente deba significar que tienes que sacrificar comodidad”, dijo Musk. “Nos aseguramos de que nuestros autos sean hermosos, rápidos y sexys”.
Sin embargo, no está claro que Trump haya sido convencido. Aunque ha adoptado un tono más positivo hacia los EVs desde el apoyo de Musk, Trump continúa criticando estos vehículos: afirma que tardan demasiado en cargarse, tienen poca autonomía, y que costarán empleos a los trabajadores automotrices. Su historial ambiental ha sido, en palabras de Trump, un desastre total.
Durante la conversación, Trump repitió muchas de estas críticas mientras elogiaba a Musk por fabricar un auto que mucha gente quiere comprar. Sin embargo, es importante señalar que las ventas de Tesla han estado disminuyendo.
“Realmente haces un gran producto”, dijo Trump a Musk durante la conversación. “Pero eso no significa que todos deban tener un auto eléctrico”.
Trump, Biden y la lucha por los vehículos eléctricos
En su campaña, Trump ha acusado falsamente al presidente Joe Biden de hacer ilegal la compra de autos a gasolina y de obligar a todos los estadounidenses a cambiarse a vehículos eléctricos. En realidad, los nuevos estándares de la Agencia de Protección Ambiental solo requerirán que los fabricantes de automóviles produzcan vehículos menos contaminantes, muchos de ellos eléctricos, pero no obligan a que todos los autos sean EVs. Además, la administración Biden ha introducido incentivos para reducir el costo de los EVs.
Musk, por su parte, parece haber cambiado de posición en cuanto al cambio climático y los EVs. Aunque intentó que Trump y sus seguidores apoyaran la misión de Tesla para un futuro sostenible, también minimizó la urgencia de esta misión.
“No creo que debamos demonizar a la industria del petróleo y el gas y a las personas que han trabajado arduamente en estas industrias para proporcionar la energía necesaria para la economía”, dijo Musk.
El respaldo de la industria del petróleo y gas a Trump
La campaña de Trump ha recibido millones de dólares de la industria del petróleo y gas, cuyos ejecutivos esperan que Trump revierta las políticas ambientales de Biden si gana en noviembre.
Musk afirmó que la transición a una economía de energía sostenible podría llevar entre 50 y 100 años, a pesar de las advertencias de la comunidad científica sobre los puntos de inflexión climática.
Trump argumentó que los EVs no son una solución perfecta porque la electricidad necesaria para cargar sus baterías proviene de combustibles fósiles hasta que las redes eléctricas puedan hacer la transición a energía limpia.
La transición a energía limpia sigue siendo un desafío
“Para crear tu auto eléctrico y generar la electricidad necesaria, los combustibles fósiles siguen siendo necesarios en las plantas generadoras”, dijo Trump. “No puedes escapar de eso en este momento”.
Aunque la generación de electricidad para cargar EVs puede crear contaminación, los propios EVs no tienen emisiones por el tubo de escape y son preferibles a los vehículos a gasolina. Muchos estados están en proceso de cambiar de la generación de electricidad con combustibles fósiles a fuentes más renovables, como la energía solar y eólica.
Musk y Trump coincidieron en que combatir el cambio climático no debería ser inconveniente para la gente. “No necesitamos detener a los agricultores para que no cultiven”, dijo Musk, añadiendo: “La gente aún puede comer un bistec, y aún puede conducir autos a gasolina”.
La realidad del cambio climático y el futuro de las políticas ambientales
Estas declaraciones ignoran la realidad del cambio climático. Luchar contra este problema requerirá cambios sistémicos y comportamentales. El ganado contribuye significativamente al cambio climático, generando metano que atrapa el calor en la atmósfera, mientras que los autos crean dióxido de carbono, otro gas de efecto invernadero. Es esencial que comamos menos carne roja y conduzcamos menos para vivir de manera más sostenible.
Por su parte, la administración Biden está enfocada en obligar a las grandes industrias a hacer la transición a fuentes de energía menos contaminantes, ya sea en plantas de energía, fabricantes de automóviles o la construcción. Trump, en cambio, ha revertido muchas de estas medidas, invitando a las industrias a contaminar más. Además, las decisiones de la Corte Suprema bajo su mandato han dificultado que cualquier administración proteja el medio ambiente en el futuro.
Sin embargo, Musk sigue apoyando la candidatura de Trump, lo que pone en duda su compromiso con la energía limpia. Durante su entrevista, Musk presionó suavemente a Trump para que apoyara la energía renovable, pero el expresidente expresó escepticismo sobre si el cambio climático es la amenaza más urgente.