La Agencia Internacional de Energía (IEA) revela en su último informe el impacto significativo de la inteligencia artificial (IA) y la minería de criptomonedas en el creciente consumo de energía de los centros de datos. Descubre cómo estos desarrollos tecnológicos están generando críticas ambientales y las medidas necesarias para abordar este desafío.
La dependencia de los centros de datos para almacenar información clave, desde correos electrónicos hasta videos de gatos, se ve amenazada por el crecimiento exponencial de la minería de Bitcoin y la capacitación de IA. Este fenómeno ha desencadenado preocupaciones sobre el impacto ambiental, especialmente en términos de emisiones de gases de efecto invernadero, lo que destaca la necesidad urgente de transición a fuentes de energía renovable.
Según el informe de la IEA, en 2022, los centros de datos, criptomonedas y la IA representaron el 2% de la demanda mundial de electricidad, consumiendo 460 TWh. La minería de criptomonedas sola consumió aproximadamente una cuarta parte de esa cifra, alcanzando los 110 TWh en 2022.
Proyectando hacia el futuro, se estima que el consumo de electricidad de los centros de datos, incluyendo criptomonedas e IA, podría duplicarse para 2026, alcanzando hasta 1,050 TWh. Este crecimiento se compara con la demanda eléctrica de un país adicional, como Suecia o Alemania, dependiendo del ritmo de desarrollo tecnológico.
Estados Unidos lidera en cantidad de centros de datos, representando el 33% de los 8,000 en todo el mundo. La IEA prevé un rápido crecimiento en el consumo de electricidad de los centros de datos en los Estados Unidos, pasando del 4% de la demanda en 2022 al 6% en 2026, impulsado por la expansión de redes 5G y servicios basados en la nube.
Irlanda, con bajos impuestos corporativos, se perfila como un hotspot para nuevos centros de datos. Sus 82 centros existentes representaron el 17% del consumo eléctrico del país en 2022, y se espera que 54 adicionales contribuyan a casi un tercio de la demanda anual de electricidad para 2026.
El informe advierte sobre los desafíos de la rápida expansión de centros de datos, no solo en Irlanda sino también en lugares como Londres, donde la demanda dificulta el desarrollo de viviendas, y en Texas, donde las minas de criptomonedas presionan la envejecida red eléctrica.
Dado que los centros de datos son almacenes de computadoras, el 40% de su demanda de electricidad proviene de la informática. La incorporación de la IA aumenta aún más la demanda, y según el informe, la Búsqueda de Google podría consumir hasta diez veces más electricidad en un escenario completamente impulsado por IA.
A pesar de algunos avances en la reducción del impacto ambiental de las criptomonedas, la red Bitcoin sigue siendo una preocupación importante, siendo responsable de la mayoría de las emisiones de carbono relacionadas con la minería de criptomonedas.
Afortunadamente, la IEA pronostica un crecimiento acelerado de las energías renovables a nivel mundial, superando al carbón y generando más de un tercio de la electricidad mundial para 2025. Sin embargo, se destaca la importancia de mejorar la eficiencia energética, como adoptar sistemas de enfriamiento de alta eficiencia, para equilibrar el aumento de la demanda eléctrica con el aumento de las energías renovables.