CES 2024: el “auto volador” de Supernal que está inspirado en las abejas y es tan silencioso como un lavavajillas
La filial de movilidad aérea de Hyundai Motor Group presentó por fin el S-A2, su aeronave eVOTL para pasajeros. No es el único torbellino eléctrico que intentará remontar el vuelo en el CES 2024.
Aunque este Consumer Electronics Show (CES) 2024 ha sido más discreto en el ámbito de los vehículos eléctricos para las calles de la ciudad, ya que Ford, General Motors, Toyota y Stellantis no han expuesto en la feria, el 2024 parece ser un año en el que las empresas volverán a intentar por todos los medios hacer realidad los autos voladores.
Las aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) para el desplazamiento urbano ultrarrápido parecen encontrarse siempre a unos pocos años de distancia, pero la división de movilidad aérea de Hyundai, Supernal, está realizando aparentemente una jugada conjunta para materializar este modo de transporte.
El concepto de producto final de Supernal de su eVTOL, el S-A2, es un vehículo totalmente eléctrico, para un piloto y cuatro tripulantes, diseñado para ofrecer supuestamente viajes aéreos diarios para pasajeros de forma segura, eficiente y, sí, asequible.
Cómo es el Supernal S-A2, el “auto” volador de Hyundai
Partiendo del S-A1, el primer concepto de Supernal presentado en el CES 2020, este nuevo S-A2 está pensado para alcanzar velocidades de crucero de hasta 190 km/h (120 mph) a unos 450 metros (1,500 pies) de altura, transportando velozmente hasta cuatro pasajeros en distancias de 40 a 60 kilómetros (25 a 40 millas) cada vez. Ocho rotores basculantes proporcionan la capacidad de vuelo vertical. Al despegar, los cuatro delanteros apuntan hacia el cielo y los cuatro traseros hacia abajo. Luego, para el “vuelo normal”, todos giran horizontalmente.
Sin embargo, la verdadera ventaja es la promesa de Supernal de que, cuando entre en servicio, el S-A2 funcionará presuntamente de forma tan silenciosa como un lavavajillas: 65 decibeles en las fases de despegue y aterrizaje vertical, y 45 decibeles en vuelo horizontal.
El diseño del SA-2 es impactante, y con justa razón. Luc Donckerwolke, presidente, director de diseño y director creativo de Hyundai Motor Group, ofreció a WIRED una visita guiada por el interior. (La marca invitó a WIRED a su evento para medios de comunicación en el CES y pagó parte de los gastos de viaje de nuestro reportero). Durante la visita, Donckerwolke reveló que la colocación de los cristales en el fuselaje tomó como referencia entidades biológicas concretas: los insectos.
“El diseño DLO (traducido como ‘abierto a la luz del día’) [del cristal] trata de permitir la mayor visibilidad posible. Cuando vuelas en un avión, miras hacia delante. Cuando lo haces en un helicóptero o VTOL, miras hacia abajo para ver dónde aterrizas, tanto los pasajeros como el piloto”, explicó Donckerwolke. “La biomímesis era importante en este caso”.
Donckerwolke y su equipo idearon una solución que se inspiraba en las abejas y después configuraron la ubicación de las ventanas y el diseño del SA-2 con base en las cabezas de estos insectos. “Luego lo exageramos dinámicamente, como si la cabeza de la abeja se hubiera transformado por la velocidad”.
También se recurrió al diseño generativopara crear los marcos de los asientos y asegurarse de que se empleaba la menor cantidad posible de metal, reduciendo así el peso y dotando a los asientos de propiedades de absorción de energíapara dispersar las fuerzas ejercidas por el despegue y el aterrizaje verticales.
Detrás de la cabina, en la parte trasera del fuselaje se alojan ocho unidades de baterías separadas, dispuestas de esta manera por motivos de seguridad: en caso de que una unidad deje de funcionar, las otras seguirán suministrando energía al vehículo. De hecho, Supernal quiere alcanzar los niveles de seguridad de la aviación comercial para el SA-2, lo que significa que, entre otras estipulaciones, en caso de fallo la aeronave tendrá componentes duplicados incorporados no solo en el tren de potencia, sino también en los controles de vuelo y los componentes electrónicos. Al parecer, el SA-2 tampoco necesita que trabajen los ocho propulsores para volar.
Lo siguiente que Donckerwolke quiere hacer es enfocarse en la firma luminosa del SA-2. Tiene experiencia en el diseño de automóviles y pretende que la gente reconozca el Supernal eVTOL en el aire por ella, de forma parecida a lo que intentan hacer los diseñadores de autos con las formas de los conjuntos de luces de los modelos. “El S-A2 es una verdadera representación de [la combinación de] ‘un auto con una aeronave’”, comenta.
Aún no hay detalles sobre la capacidad de la batería o las velocidades de carga, estadísticas cruciales para la aviación eléctrica de corta duración, pero Jaiwon Shin, presidente de Hyundai Motor Group y CEO de Supernal, declaró que la compañía preferiría un sistema de carga rápida de alto voltaje, que no tendría que recargarse entre cada vuelo, sino solo después de cuatro o cinco trayectos, o incluso durante la noche.
“Autos” voladores, ¿más cerca de lo que creemos?
“Desde el principio, Supernal ha tenido la misión de crear el producto y el mercado adecuados en el momento oportuno”, señaló Shin en un comunicado de prensa en el CES. “Supernal está preparada para ofrecer una nueva era de vuelo”. Bueno, no del todo lista: aunque se espera que los vuelos de prueba del SA-2 tengan lugar a finales de este año, la compañía asegura que no entrará propiamente en el sector de la movilidad aérea urbana sino hasta 2028.
Supernal no ha sido la única empresa que ha presentado versiones de autos voladores en el CES de este año. La división AeroHT de Xpeng mostró lo que denomina “portaaviones terrestre”, un vehículo volador modular que se podrá reservar a finales de este año. El diseño en dos partes permite al usuario alternar entre los modos terrestre y aéreo.
El “módulo terrestre” híbrido de tres ejes y seis neumáticos de Xpeng cuenta con tracción en las cuatro ruedas, dirección trasera y espacio para cuatro o cinco pasajeros. Al parecer, su tren de potencia electrificado será capaz de proporcionar energía al módulo aéreo, dotándolo de “múltiples recargas”. El módulo aéreo es un VTOL totalmente eléctrico para dos personas, con modalidades de conducción manual y automática.
Pivotal también exhibió su nuevo Helix, que tiene un precio inicial de 190,000 dólares en Estados Unidos, una aeronave personal monoplaza totalmente eléctrica que, según la compañía, no requiere certificación de piloto por parte de la Administración Federal de Aviación de ese país. Los envíos comienzan en junio. La máquina transportable (cabe en un remolque de casi cinco metros o 16 pies) pasa de su lugar de almacenamiento al cielo en 30 minutos. La autonomía es de 32 kilómetros gracias a la batería de ocho kilowatts/hora, que se carga al máximo del 20% al 100% en 75 minutos. La velocidad de crucero es de 101 km/h (63 mph). Y si ocurriera lo peor, el Helix es capaz de arreglárselas sin uno de sus ocho rotores fijos, y también lleva un paracaídas balístico a bordo.