Desde su perspectiva, la empresa parece llegar tarde a la escena de la IA generativa, careciendo de una propuesta distintiva más allá de la presencia de Musk en sí misma.
En un mundo donde la competencia en el campo de la inteligencia artificial es feroz, xAI busca destacar entre la multitud. A pesar de la falta de claridad sobre su propósito definido, Musk ha estado promocionando la idea ante inversores potenciales, buscando recaudar miles de millones de dólares en financiamiento.
xAI, hasta el momento, ha lanzado un solo producto: Grok, un LLM (Modelo de Lenguaje Grande) que, según se dice, tiene una personalidad peculiar. Sin embargo, su utilidad y diferenciación en comparación con otras ofertas gratuitas de chatbot en el mercado son cuestionables, y su vínculo con la plataforma Twitter parece ser una de sus características más destacadas.
La relación entre xAI y Tesla también plantea interrogantes. Aunque Musk ha expresado su preferencia por desarrollar productos fuera de Tesla, xAI parece estar utilizando datos de la compañía automotriz, lo que plantea preocupaciones entre los accionistas de Tesla sobre la privacidad y la utilización de datos.
En un mercado saturado de empresas de IA general, la pregunta que queda es: ¿quién está dispuesto a financiar otra empresa más en un espacio tan competitivo? Musk puede ser un líder visionario en muchos aspectos, pero la viabilidad y el enfoque de xAI parecen ser objeto de escrutinio en esta etapa.