Fisker, la empresa de vehículos eléctricos, enfrenta una crisis financiera con advertencias de quiebra y despidos del 15%. Descubre los desafíos y negociaciones clave mientras la compañía lucha por sobrevivir en el competitivo mercado de los vehículos eléctricos en 2024.
Fisker advierte que se enfrenta a una crisis financiera que podría llevarla a la quiebra en 2024. La compañía de vehículos eléctricos planea despedir al 15% de su fuerza laboral en un intento desesperado por reducir costos y asegurar su supervivencia. A pesar del aumento en las ventas de vehículos eléctricos, Fisker se encuentra entre las empresas afectadas por problemas de producción, una disminución en la demanda y altas tasas de interés, lo que amenaza su viabilidad.
El CEO de Fisker, Henrik Fisker, reconoce los desafíos que enfrenta la industria y anuncia medidas para enfrentar la crisis. La empresa está en conversaciones con inversionistas potenciales y busca nuevas formas de reducir gastos, incluida la optimización de sus operaciones y la búsqueda de alianzas estratégicas.
A pesar de la incertidumbre financiera, Fisker mantiene la esperanza de un crecimiento futuro, especialmente si logra concretar una transacción con un importante fabricante de automóviles. Sin embargo, la empresa enfrenta críticas por problemas de calidad en su modelo Ocean, incluida la pérdida de potencia y fallas en los controles remotos.
El panorama para las empresas de vehículos eléctricos puros se ha vuelto más desafiante, con algunos clientes mostrando reluctancia a hacer el cambio debido a preocupaciones sobre el precio y la infraestructura de carga. Aunque las ventas de vehículos eléctricos siguen en aumento, el ritmo es más lento de lo esperado, mientras que los vehículos híbridos ganan terreno en el mercado.}